viernes, 22 de febrero de 2008

Enchiladas

Jesús “Chile” López Martínez

Hace unos meses me jubilé como empleado de Comisión Federal de Electricidad. De nueva cuenta, como me sucedió desde mis años mozos, el deporte y sus crónicas atrajeron mi atención y aquí estoy con éste proyecto denominado “De Campeonato”.

De hecho nunca he estado retirado del acontecer deportivo. De alguna u otra forma siempre he estado ligado a él. Primero como hijo del umpire Rodolfo “Chile” López Marrón; después como pelotero amateur, muchos tiempo como promotor, y de años a la fecha como cronista del acontecer en Puerto Libertad, lo que me llevó a escribir el libro “25 años en Libertad”.

La intención de arrancar hoy con ésta publicación tiene horizontes amplios a la vista, y que mejor marco para la “patadita de la suerte” que el IX Congreso de Cronistas Deportivos. Hoy colaboran algunos de sus miembros, en próximas ediciones lo harán otros. Habrá espacio para todos, siempre.

Nuestra intención será siempre honrar a quienes con su quehacer deportivo lo merezcan. Rescatar la historia de viejas glorias. Impulsar la trayectoria de quienes muestren facultades de llegar lejos. Siempre con un ánimo de optimismo, en estricto apego al espíritu que debe guiar al deporte.

Lo cual no quiere decir que no encontrarán en nuestras páginas verdades que a veces incomodan, principalmente en el terreno profesional, donde el dinero genera a veces reacciones desfavorables para el espectáculo.

Aquí encontrará de todo como en botica. No nos cerraremos a una sola disciplina aunque reconocemos que hay deportes que por su popularidad son los más practicados en nuestra región.

Finalmente, aceptamos que no somos los más experimentados pero sí tenemos ganas de desarrollar nuestras capacidades en éste noble proyecto editorial… ¡y lo haremos!

Así sea.

Los mitos magníficos del deporte en Guaymas

Detalles
Asención Sánchez Vázquez

Cuando el guaymense Jesús Alberto Rubio me habló del trabajo desarrollado por un tamaulipeco de Reynosa avecindado en Monterrey, sobre “Los orígenes del béisbol en México”, el tema me apasionó y decidí, como primer evento del IX Congreso de Cronistas Deportivos, traerlo a exponer a Guaymas los resultados, hasta ese día, obtenidos.

Sabía que me jugaba un volado pues la disputa por la cuna del béisbol en México, que por muchos años nos adjudicamos, y que con tanto fervor defendieron Miguel S. Durazo en su libro “El Béisbol en Sonora”, y Francisco Rodríguez Gómez, “El Gallo”, estaba en juego.

Don Torcuato platicó a Durazo haber sido testigo de que el mes de mayo de 1877 marinos del buque Montana limpiaron un terreno y practicaron el juego de pelota, habiendo sido causa de risión entre los guaymenses a un costado de la Plaza de las Carretas, la careta del receptor.

La investigación de César González, avalada por el Salón de la Fama del Béisbol en México al través de su directora Magdalena Rosales Ortiz, desmitifica lo contado por el señor Marcor, editado por Durazo y defendido a capa y espada por el Gallo Rodríguez. En colaboración especial para “De Campeonato”, el joven investigador narra como el buque Montana tenía casi 5 meses hundido en mayo de 1877, y la careta había sido presentada en sociedad un mes antes en Boston, Massachussets.

También nos dice que 10 años antes de 1877 jóvenes sonorenses, entre ellos guaymenses, estudiantes todos del Santa Clara Collegue, en el área de San Francisco, California, fueron los primeros en jugar béisbol y traer dicha disciplina a sus lugares de origen en periodos vacaciones. En ese contexto es previsible que en Guaymas se jugó pelota mucho antes de la fecha referida por don Torcuato Marcor.

Echado abajo el hoy mito, en su exposición del 5 de mayo de 2007, en el patio central de Casa de la Cultura, mostró publicación que establece que muchos años antes de 1877 se celebró en Matamoros, Tamaulipas, juego de béisbol entre mexicanos y un equipo de Brownsville, Texas, a visitas pagadas.

Y como marines estadounidenses también lo jugaron antes del 3 de mayo de 1877 en Mazatlán, Sinaloa. Hasta allí la dejo. César González regresará a Guaymas con los avances de su investigación en el marco del IX Congreso de ASOCRODE del 15 al 17 de febrero de 2008.

Primer guaymense en Grandes Ligas…

NO FUIMOS POCOS, en su momento, los que creímos que Miguel Arturo Ojeda Sequeiros fue el primer guaymense en debutar y jugar en Ligas Mayores. El Negro de Guaymas lo hizo el 17 de marzo de 2003 con Padres de San Diego. Jonroneó en la novena entrada para derrotar a Cardenales de San Luis.

Sin embargo fue otro Miguel quien habiendo nacido en el municipio de Guaymas, se enfundó en la casaca de Gigantes de San Francisco el 6 de abril de 1999. Miguel Alfonso del Toro Gastélum lanzó contra Rojos de Cincinnati, de visitantes.Relevó 3 entradas un tercio. Poncho a uno y permitió un incogible. Gigantes remontó y ganó el juego 7-6. Dusty Baker tenía grandes planes para quien se fuera a jugar a Japón el 2001.

Cuatro días después de arribar de la tierra del sol naciente, del Toro se mató a las 09:05 horas del 6 de octubre de 2001 en la calle 900 entronque a Pueblo Yaqui. Oriundo de la entonces comisaría de San Ignacio Río Muerto, municipio de Guaymas, chocó por alcance con la llanta trasera de un tractor y con el murieron sus acompañantes Mario Cayetano Armenta y Gerardo Moreno Melchor.

Tenía 26 años de edad y conducía un pick up Ram modelo 95 placas UN 33907. Dentro del vehículo se encontró una hielera con cerveza. Se presume andaban amanecidos festejando los éxitos de quien, según Dusty Baker, lanzaría rectas superiores a las 90 millas.

En Mexicana de Verano jugó para Broncos de Reynosa bajo la dirección del también sonorense Aurelio Rodríguez. En la MEX-PAC jugó para Venados de Mazatlán. Tras su muerte, le rindieron homenaje póstumo en el "Teodoro Mariscal" y retirtaron su número, el 28.

La directiva entregó a sus compañeros Juan Cerros, Miguel Ojeda y Oscar Rivera el reconocimiento para que, por su conducto, lo hicieran llegar a la familia de Miguel del Toro avecindados en el hoy municipio de San Ignacio Río Muerto.

Primer futbolista profesional…
TAMBIÉN LA GENTE del balompié creyó por mucho tiempo que el orgullo del Fovissste, Juan Carlos “El Topo” Valenzuela Hernández, fue el primer profesional al saltar a la cancha enfundado en la casaca de los Zorros del Atlas y vencer 2-0 al Tecos de la UAG el sábado 19 de abril de 2003.
“El Topo” Valenzuela, según Wikipedia, ganó dos millones de pesos con el Atlas, pero obtendrá muchos más con Tecos, que sólo por comprar su carta pagaron 2 millones de dólares.
Nació el 15 de mayo de 1984. Mide 1.82 metros y pesa 66 kilos. Con Atlas fue defensa central y Tecos lo utilizará de lateral. Fue seleccionado nacional sub-17 y sub-20, y preolímpico. El argentino César Luis Menotti lo pidió para la UAG.
Tiene 23 años y un gran futuro.
Dice Víctor Roberto Parra Maldonado y su compadre Armando Escalante que en Guaymas nació, y vive, actualmente, un exfutbolista de apellido Limón que jugó en Primera División para los Panzas Verdes del León.
Pero sin lugar a dudas que Oscar Bonfiglio Martínez, “El Yori”, nacido en estación Ortiz el 5 de octubre de 1905, registra un historial harto interesante, sobresaliente.
Fue un militar y futbolista mexicano que jugaba en la posición de portero. Jugó para elClub Deportivo Marte y laSelección Jalisco.
Bonfiglio se inició y casi siempre jugó con equipos auspiciados por el Ejército Mexicano. Primero fue el Guerra y Marina que cambió su nombre por Son Sin y posteriormente dio nacimiento al antiguo Marte. Al desaparecer el Marte, Oscar se retiró jugando una temporada con el Asturias y en el año de 1938 jugó su último partido con el América.
Participó en los Juegos Olímpicos y el Mundial de 1930 con la Selección Mexicana. No tuvo un muy buen debut en los juegos olímpicos de Amsterdam, ya que el30 de mayo de 1928 en el estadio olímpico, cuando México enfrentó a la selección de España fue eliminado por un severo marcador de 7 a 1.
Fue el primer portero en recibir un gol en la historia de la Copa Mundial de Fútbol, y este fue del francés Lucien Laurent. También se convirtió en el primer portero en parar un penalti al detener el tiro del argentino Fernando Paternoster, entonces especialista en la ejecución de tiros de pena máxima.
Como militar llegó a ser General de División del Ejército Mexicano. También es el padre del actor mexicano Oscar Morelli. Murió el 14 de enero de 1987 en la ciudad de México. Se retiró en 1938 jugando para el América.

El “Navajo” Borboa y…
Julio César Borboa fue el primer guaymense en ceñirse un fajín de campeón mundial tras vencer en San Antonio, Texas al local, Robert Quiroga. Otro nacido en Guaymas, pero registrado en Empalme, que fue campeón mundial, es José Luis Castillo. Pero el que pudo habersido, pero no quiso, fue Marcos Geraldo. Peleó con los mejores de su época –Sugar Ray Leonard, Marvin Hagler y Tommy Hearns—y algunos conocedores dijeron que fueron peleas arregladas para perder en el ring, pero embolsarse más dólares de los pactados en el contrato. Sólo él sabe la verdad.

Babalú.

asencion61@hotmail.com
tibosanchez@gmail.com

Semblanza del "Melo" Almada

Cuando apenas tenía 3 meses de haber nacido, un 7 de Febrero de 1913, sus padres -Baldomero
y Amelia- y hermanos -Amelia, Esther, Concha, Luis, Aurora y Carmen- tuvieron que emigrar a los Estados Unidos, debido los efectos de la revolución mexicana.

Vivían en Huatabampo, Sonora, que fue a donde llegó la orden que don Baldomero fuese fusilado. Era un fiel amigo del general Alvaro Obregón y lo veían como una amenaza. Sin embargo, el telegrafista era su pariente y le avisó antes de entregar la orden al cuartel. Así pudieron abandonar la ciudad; pero días después sería su pariente quien llegara al paredón.

Vivió su niñez y juventud en Los Angeles, California, cursando estudios, siempre mostrando gran habilidad para el deporte. Fuese futbol americano, atletismo o béisbol, que lo mantenían el año completo ocupado, destacada en todos. Al terminar la preparatoria hizo un viaje a Seattle, para visitar a Luis que estaba con los Pilotos de Seattle, sucursal de Boston. El club pasaba por un mal rato, habiéndose lesionado varios jugadores y otro tanto caído enfermo debido a una epidemia. El
contrariado manager pedía refuerzos, que no llegaban y Luis le sugirió firmar a su hermano menor. Hubo necesidad de pedir un permiso especial a los padres, quienes después de horas accedieron. Lo firmó el gran Eddie Collins, y debutó rápidamente impresionando a propios extraños.

Dos años mas tarde, el 8 de Septiembre de 1933 debutó en las Ligas Mayores, en Boston y contra los Tigres de Detroit. Habían programado una doble jornada, y era Día de Damas. Mas de 20,000 aficionados asistieron y siendo que los Medias Rojas fueron barridos en ambos juegos por marcador idéntico de 4-3, “Mel” puesto que ya había sido bautizado con el apodo simplificando la
difícil pronunciación de “Baldomelo” como lo hacían sus compañeros y cronistas, debutó por la puerta grande.

En su primer turno ante la estrella de la rotación felina, el derecho Tommy Bridges, negoció un pasaporte como primero del orden. Poco después anotó. En su 2do. turno conectó su primer imparable, un sencillo, y terminó la doble jornada de 8-2 (4-1 en cada partido).

Ese mismo año, viviría una experiencia que jamás olvidó; pero de la cual rara vez platicaba a pesar de sentirse muy orgulloso. El 1ro. de Octubre de 1933, los Yanquis estaban fuera de toda posibilidad de llegar a la Serie Mundial. Iba a ser el último compromiso de la campaña, y nada menos que contra Boston. Le pidieron a Babe Ruth que abriera como lanzador, y aceptó. Era
solo la 5ta. ocasión que el Bambino lo hacía desde su cambio de los Medias Rojas a los Yanquis en 1919. Había ganado todos. Y esta vez no fue la excepción. Lanzó la ruta completa, logrando un triunfo de 6-5 donde rompió un empate a 5 en la 8va. con su jonrón 34 del año, el 686 en su carrera. Pero Melo también había gozado de una gran jornada despachando tres inatrapables ante el inigualable Babe Ruth.

Su carrera se alargaría por 7 años en las Grandes Ligas dejando marca de .284 de por vida. En 1938 anotaría 101 carreras, record que duró entre nativos mexicanos hasta que Roberto Avila timbrara 102 en 1952. El 25 de Julio de 1937 establecería un record que nadie en la historia de las Ligas Mayores ha podido igualar: anotar 9 carreras en una doble cartelera. En el primero, se fue de 5-3 incluyendo un doble, jonrón y un pasaporte cruzando 4 veces el péntagono para
ganar los Senadores por marcador de 16-10 ante los Cafés de San Luis. En el segundo serían de nuevo otro tres indiscutibles, entre ellos un doble, además de dos pases mas y una base robada, coleccionando cinco anotaciones y dejando la pizarra en 15-12, para la barrida en San Luis.

Once meses después, casi exactos (15 de Junio), los Cafés lograron adquirir a Melo, como ya le decían sus amigos y comunidad hispana, luego de varias intentonas. No los defraudó ya que apenas llegó al club, ligó una racha de 19 juegos dando al menos un hit en cada uno. Fue cortada el 12 de Julio en el 1er. encuentro de una doble jornada en el Yankee Stadium.

San Luis perdió 7-3 y Melo se iría de 3-0, aunque se embasó en un transferencia mas un error cargado a Frank Crosetti, campo corto de los Yanquis. Hubo varios reclamos porque la bola le botó mal, dándole en el pecho; pero el anotador oficial no revocó. En el 2do. del día, comenzaría otra racha (de 4-1, aunque los Yanquis volvieron a ganar, 10-5) y esta vez no pararía
su seguidilla hasta ligar 29 cotejos mas. En otras palabras fueron un par de rachas, 19 y 29 juegos, o sea dio hits en 48 de 49 encuentros; pero aparte, logró embasarse en 53 juegos consecutivos Melo se retiró en 1939, jugando su último encuentro del 1 de Octubre con los Dodgers de Brooklyn. Fue entronizado en la Salón de la Fama del Beisbol Mexicano en Monterrey, el 10 de Marzo de 1973...

MUCHAS GRACIAS
edalmada@pasandolabola.com

Lanzando para home

Nunca han sido fáciles los cuatro campeonatos que ha ganado Obregón, dentro de la pelota de invierno. En la temporada de 1965-66, llegaron los Tomateros de Culiacán y los Venados de Mazatlán, tomando el nombre de Liga Invernal Sonora-Sinaloa. El sistema de juego fue de rol corrido. Los grandes favoritos eran Hermosillo, Guaymas y Los Mochis. A los Yaquis le daban un cuarto lugar. Llegaron los pitcheres Fred Wall y Dave Dixon, éste último no duró mucho y lo enviaron de regreso. Como los lanzadores mexicanos se portaron a la altura de las circunstancias, no buscaron reemplazar al pitcher derecho. La directiva que encabezó el señor Rafael Parada, consiguió los servicios de Alfredo “Yaqui” Ríos, que formó una excelente llave de dobles play con Jorge Fitch y sumando a Carlos Murrieta en tercera y William Berzunza en primera, lograron realizar nada menos que 108 dobles jugadas. Los relevos vertiginosos de Enrique Castillo, mas el poder bateador de Pancho García, aunado a su gran velocidad y el de Jaime Favela, le dieron al manager Manuel Magallón, un equipo que sorprendió a todos y como olvidar ese domingo 16 de Enero de 1966, cuando estaban trenzados Ostioneros y Yaquis en un 0-0, que se fue hasta la entrada catorce y así termino el partido por límite de tiempo. Pero antes se anunció que los Yaquis eran campeones, pues Navojoa había derrotado a Empalme.

En 1972-73 los Yaquis mantenían el convenio con los Padres de San Diego y le dieron el timón a Dave García, un hombre muy experimentado en el béisbol, en la dirección de equipos, que más tarde llegó a dirigir en las Ligas Mayores. Hubo varias claves para que los Yaquis obtuvieran su segundo banderin. Por lo pronto entraron a los playoffs y su primer enemigo fueron los Naranjeros, que eran favoritos para ser campeones. Vicente Romo fue el que les dio el pase a la final. Primero les ganó 5-0 en el Tomás Oroz y cuando estaba la serie empatada, los volvió a derrotar en Hermosillo con marcador de 7-1. Como no podía abrir la final contra Navojoa, el manager García le dio la encomienda al zurdo Dick Troedson que derrotó a los Mayos por 2-1, entrando de caballito la carrera del triunfo en la novena. Cuando la serie estaba 3-1 a favor de los Yaquis, de nuevo lució el joven Dick Troedson que se trenzó en duelo con Dyar Millar que permitió una carrera en la tercera con doble de Derrell Thomas y un bombeado de Jim Campanis que no pudo tomar Rudy Hernández que estaba en las paradas cortas. Fue todo lo que necesitó Trodeson para darle el segundo campeonato a Obregón.

El más reciente, pero de eso hace 27 años, también los Yaquis no eran favoritos para ganar, aunque tuvieron un cierre sensacional en la segunda vuelta, bajo la dirección del joven americano Lee Sigman. La llegada de Arturo González en préstamo de Navojoa, fue muy valiosa, pues ganó 8 juegos. Los grandes relevos de José Antonio Limón, mas los batazos de David Green, que resultó el campeón bateador, de Leo Valenzuela y de Derek Bryant, hicieron posible que Obregón primero eliminara a Guaymas en una serie muy peleada a siete juegos y para la final, tomaron de refuerzo al pitcher Eleno Cuen, que fue una garantía, pues ganó dos juegos, el segundo que fue del campeonato sobre los Naranjeros que manejaba el pitcher Maximino León. Como olvidar la gran atrapada de Antonio Villaescusa cuando estaba el juego0-0 en la cuarta, el triple del “Chino” Marquez y el elevado de sacrificio de Villaescusa. El último out fue un elevado a primera del gran Héctor Espino…Después más lanzamientos.

Correo Electrónico: alarb34@yahoo.com.mx

Guaymas y Empalme: Con magia, historia y béisbol

Por Jesús Alberto Rubio
jarubio@guaymas.uson.mx

Guaymas y Empalme representan en la historia del béisbol de México dos distinguidos escenarios productoras de grandes peloteros y, testigos fieles de este acontecer, sus estadios Abelardo L. Rodríguez y el Estrellas Empalmenses.

Usted también debe recordar a aquellos famosos “Ostioneritos” que incluso realizaban giras por todo el Noroeste de México y el vecino país. De ahí también salieron grandes jugadores a la pelota de paga.

Sin duda, dos ciudades graneras de beisbolistas unidas en fraternal identidad y lazos humanos y un riquísimo anecdotario popular alrededor del pasatiempo rey desde antes de que iniciara formalmente la Liga de Sonora en 1944.

Al paso del tiempo todavía resultan inolvidables aquellos enfrentamientos verbales con aquellas famosas y frases históricas “¡Chivos”! e “Hijos de Billy Pérez” hacia los empalmenses y la de “Negreros” en referencia a los guaymenses.

O todo el alboroto que armaba Miguel “Miguelón” León con su clásico megáfono portátil y ubicado en la grada central desde donde cómodamente sentado molestaba a peloteros con aquellos gritos de “Villarreal… Villarreal”, que en verdad desesperaba al Juan de Dios, receptor de los Naranjeros.

Y así también era lo mismo con Espino, Ronnie y el “Zurdo” Alcaraz, por citar unas cuantos. A Ronaldo, le gritaba: “¡No te apures.......Ronnie!”;… así era aquel Miguel León, un hombre todo béisbol y apasionado como él solo.

De aquella mi hermosa infancia bien recuerdo los camiones llenos de aficionados que iban y venían para llenar al “Abelardo” y el “Estrellas”, ambos de gratísima memoria.

Viajaban eufóricos, animados, la distancia de 15 kilómetros entre ambas poblaciones por el famoso Puente “Douglas”, ahora ya modernizado en estructura de concreto pero que durante muchos años estuvo sostenido por fuertes travesaños de madera, que eran también el soporte como “durmientes” de la vía del ferrocarril.

A Guaymas le tocó gozar en su historial a partir de a Invernal de Sonora cinco títulos y, curiosamente, Empalme, con todo y contar siempre con grandes jugadores, nunca logró un campeonato en su estadía en el circuito.

Pero la presencia y legado de grandes y notables jugadores de ambas franquicias hoy fuera de la Mexicana del Pacífico, ahí están presentes como orgullo de esta región sonorense:

Y nombres, a granel: Alfredo "Yaqui" Ríos, Jesús Sommers, Raúl Cano, Francisco Campos y su sobrino Pancho “Ponches” Campos, Miguel Ojeda, Obed Plascencia, Rodolfo “Rudy” Hernández y los hermanos Arredondo, Francisco “Japonés” Higuera…

Incluso, como dice el colega Asención “Tibo” Sánchez, el recordado lanzador Miguel del Toro, quien nació en San Ignacio Río Muerto cuando esa comisaría pertenecía al municipio de Guaymas, “por lo que prácticamente se convirtió en el primer guaymenses en llegar a la Gran Carpa… y no Miguel Ojeda”.

Bueno, también ahí estan grandes ampayers porteños como Rodolfo “Chile” López, Antonio “Chapito” Flores, entre otros… o historiadores de béisbol como Francisco “El Gallo” Rodríguez.

Ciudad Jardín…

De Empalme, La Ciudad Jardín, olvídese; también, qué magia e historia.

Los registros históricos nos dicen que entre l938 y el 42 llegaban a Empalme equipos que pertenecían a la Liga Veracruzana, en especial los Cafeteros de Córdoba que traían grandes pelotero como René González, Armando “Indian” Torres, Ramón Bragaña, Agustín Bejerano, por mencionarte algunos.

Ahí también en aquellos años idos se vio jugar a un equipo conformado por sólo hermosas representantes del bello sexo…que es mucho decir.

En esa década del 30 el equipo de Empalme se componía con puros nativos o avecindados desde niños en la ciudad rielera y entre quienes figuraban Laureano “Kiriki” Camacho, Angel Castro, los hermanos de Fundición, los Lupe, Coty y “La Comadre” Leal; el gran Jesús “Cochihuila” Valenzuela y su hermano Demetrio (“Deme”) pitcher también; Manuel “El Chueco” Lugo…bueno, tan sólo por recordar unos cuantos.

Peloteros nativos

El ex receptor empalmense Ernesto Jaramillo dice que en ese tiempo había muy buenos peloteros porque la Compañía de Ferrocarriles les daba muchas facilidades y pagaba muy buenos salarios; además de que se dedicaban sólo a jugar béisbol.

Incluso, recuerda cuando Empalme tuvo sólo peloteros nativos:

Laureano “Kiriki” Camacho de mánager; Ronnie Camacho, David García, Alonso “Lonchera” Ruiz, el mismo Jaramillo; “Pitito” Olea, Arnulfo “Negro” Manzo, “Pisi” Martínez, “Cala” Ibarra, Gustavo Mercado y Saúl “Silencioso” Villegas.

Los entronizados

Después del puerto de Veracruz, debe usted saber que Empalme es la ciudad que más miembros tiene entronizados en el Salón de la Fama del Béisbol Profesional de México: Angel Castro, Ronaldo “Ronnie” Camacho, Miguel "Pilo" Gaspar y Francisco “El Zurdo” Alcaraz. (A “Cochihuila” lo ubicaron en Sinaloa).

Bueno, los inmortales con nichos de oro en Monterrey para que el puerto jarocho sea el No. 1 con más miembros entronizados, son Roberto “Beto” Avila, Vinicio García, Apolinar Pulido "Polín", Guillermo "Memo" López, Luis “Molinero” Montes de Oca y Pedro "Charrascas" Ramírez.

Primer empalmense en Grandes Ligas

Pero, volviendo a la gloriosa Empalme:

Rodolfo "Rudy" Hernández, es hasta el momento es el único empalmense que ha llegado a jugar en Ligas Mayores, precisamente con los Medias Blancas de Chicago.

Qué decir de Angel Castro, quien representó en su época al máximo toletero jonroneril del beisbol mexicano, al igual que Claudio Solano, Ronaldo “Ronnie” Camacho, Héctor Espino, Andrés Mora y Nelson Barrera.

Ronaldo Camacho, recuerde, implantó el récord de 27 jonrones en la campaña de 1963-64 en la Invernal Sonora Sinaloa, luego de establecer también ese mismo año marca de cuadrangulares con 39 en la Mexicana de Verano, la que cayó a la siguiente campaña cuando Espino conectó 46.

Años después, Bob Darwin, exactamente en la temporada 71-72, empataría el récord de 27 del gran Ronnie Camacho, quien actualmente trabaja como promotor deportivo en la Compañía Minera de Cananea.

Pancho Alcaraz, “Pilo” Gaspar.....

Y sigue la lista con Francisco "El Zurdo" Alcaraz, notable lanzador y luego ampayer con experiencia en México, Cuba y Venezuela... y obviamente en Series del Caribe.

Y cuánto podemos decir de Miguel "Pilo" Gaspar, uno de los mejores receptores de todos los tiempos del beisbol mexicano y quien siempre le hizo la broma a Héctor Espino diciéndole "tu pegaste más de 400 jonrones en México, pero nunca diste cuatro en un juego... y yo sí lo hice" (¡gulp!).

Fue en Laredo, en la Liga Río Grande Valley en 1950, cuando "Pilo" Gaspar conectó cuatro jonrones en un juego. En esa temporada dio 29 para la calle, produjo 114 carreras, un promedio de .335 y solo lo poncharon en 35 ocasiones en 498 turnos.

También ahí en la ciudad rielera nació Saúl “El Silencioso” Villegas, de enorme poder al bat; César "El Oloroso" Gutiérrez, un pitcher con una perfección en su control que ni mandado pintar; o qué puedo decir de Jaime López, un “hombre hit” que terminó su carrera con arriba de .300 de porcentaje y que busca un nicho de oro en el Salón de la Fama del Beisbol Profesional de México, aunque sea ya en el renglón de Veteranos.

“Cochihuila” Valenzuela....

Hay otro detalle: Fíjese que se considera hijo adoptivo de esa ciudad a Jesús "Cochihuila" Valenzuela, también en el Salón de la Fama, ya que con todo y que nació en Culiacán, Sinaloa, desde su infancia comenzó a jugar beisbol en la ciudad rielera.

Firmado por “Yamo” Ornelas en 1938 para los Alijadores de Tampico, le dio fama y prestigio al equipo jaibo en los 11 años que lanzó en la Liga Mexicana en su presentación en el circuito, derrotó al Aguila 2-1, en Veracruz, en cerrado juego contra Silvio García.

Dominador profundo de la curva, Valenzuela pronto se hizo popular entre los aficionados, y más tarde se convirtió en uno de los pitchers derechos estrellas de la liga.

En el parque de Tampico, en donde era muy difícil de vencer, tuvo sus actuaciones sobresalientes: En 1945, superó en histórico duelo por 1-0, en 10 entradas, a Tomás “Planchardón” Quiñones, del Puebla, con un jonrón de Angel Castro.

En 1946, sostuvo dos tremendas batallas contra Max Lanier, de los Azules del Veracruz, en un lapso de tres días. El primer juego terminó 0-0 en 11 innings; el segundo lo ganó Valenzuela 1-0.

En su mejor temporada, conquistó 25 victorias en 1942, récord para lanzador mexicano que comparte con Antonio Pollorena y Miguel Solís.

Un año antes se coronó en carreras limpias, con 3.12 de porcentaje. En su carrera, tuvo cifras de 141-119 en triunfos y derrotas, para .542 de promedio global. Y claro, hay que decirlo de nuevo: Contra la creencia generalizada, es oriundo de Sinaloa, y no de Sonora, pero se crió y se hizo pelotero en la sonorense ciudad de Empalme.

Y hay más...

Por supuesto que debo citar al gran receptor Laureano Camacho, tío de Ronnie; los hermanos Domingo y Eduardo “Walo” Rivera y Germán y Guillermo Raygoza; el magnate Abundio Vargas; Ricardo Carrillo, Neftalí García: el jugador y luego umpire Encarnación Ibarra; Manuel Durán, Nicolás Genestas, amateur inmortal; Ramón Martínez, David García hijo, Federico Bojórquez, Rodrigo Sandoval, Romualdo "Changarro" Urías, el pítcher Alonso Ruíz; el famoso “Correbolas” y luego ampayer, José Luis "Chino" Valenzuela.... ¿y cuántos más?

Y no olvidemos al aquel gran batboy, Tomás "Tommy" Espinoza, de fama mundial por la forma en que entretenía al aficionado haciendo mil y una diabluras sobre el terreno de juego al grado tal de que acostumbraba bañarse ¡con tierra del campo de juego!

Gran anécdota

Me dice Porfirio Magaña Carrillo, también empalmense de nacimiento y corazón, además de gran pelotero y promotor de béisbol hoy exitoso empresario en Guadalajara, que en la lista también debe esta el bat boy con gran trayectoria con los Tigres y Tomateros, el “Pajaro” Ibarra.

Así mismo, cita a Beny Escalante, quien también jugó con Tigres y Aguascalientes; a Jaime “El Pato” Rodríguez, de los Tigres del México y Martín Raygoza, gran pitcher de la dinastía.

Por cierto, Porfirio cuenta una interesante anécdota que vale la pena compartir:

“Anda circulando aquella cuando le preguntaron al flaco Corella que si como le había ido al enfrentarse a Germán Raygoza y que contestó con su característico sarcasmo: “Nunca le pude batear”, teniendo de respuesta “Ah, ¿era un “caballón” el Germán?”, a lo que dijo: “No, siempre fui octavo bat y cuando me tocaba batearle ya lo habían sacado a palos!”. (Hay otra idéntica del Pilo, también cuando era el octavo bat en el line up).

En fin, en fin… lo que ha usted leído y espero disfrutado, por supuesto que no es todo porque Guaymas y Empalme en béisbol dan y ¡han dado esto y más!

¡Bienvenidos congresistas al IX Congreso Estatal de la ASOCRODE!

Beisbolistas fallecidos trágicamente

Dr. Braulio Arteaga
270953@cantv.net

Innumerables episodios de carácter trágico donde han fallecido jugadores de grandes ligas o de ligas menores han enlutado a los campos de béisbol desde la época en que se inició este deporte. Cuando Jim Craighton un ex-jugador de cricket y de los primeros beisbolistas que participó en la Asociación Americana de béisbol murió por ruptura de su vejiga al caerse de un columpio por allá en 1861 muchos fueron los jugadores que perecieron por ahogamiento, accidentes ferroviarios y hasta envenenamiento.

En este artículo voy a recordarles los casos mas sonados por la prensa de esos años.

En 1881 se suicida de un disparo el primer jugador de ligas mayores, se trataba de Fraley Rogers de 31 años de edad jardinero del Boston, cuatro años mas tarde es asesinado con arma de fuego Andy Swan primera base del Washington.

En 1894 Terry Larkin lanzador de los Cachorros de Chicago también se suicida cortándose la garganta.

Todos estos casos dieron mucho de que hablar a la prensa y a los fanáticos de la época. Pero el caso más sonoro ocurrió en 1903 cuando un jugador estrella de Filadelfia Ed Delahanty, utility, quien había logrado en dieciséis campañas un average de 346 y bateado cuatrocientos en tres oportunidades muere al caerse desde las cataratas del Niágara mientras disfrutaba sus vacaciones, éste jugador mas tarde sería elevado al Salón de la Fama gracias a sus excelentes números.

Por el año de 1914 fallece el primer beisbolista atropellado por un vehículo de motor fue Heinie Reitz infielder del Baltimore.

En 1916 en las ligas menores muere el primer jugador golpeado por una bola: John Dodge, de quien no se tiene mas referencias.

En 1918 un lanzador de Filadelfia John McCloskey muere al ocurrir una explosión dentro de una mina. Pero también ocurrieron decesos en mas de 85 beisbolistas de ligas mayores y menores durante los períodos de la primera, segunda guerra mundial, y Vietnam cuando prestaban servicio militar.

En el año de 1920 ocurre la única muerte trágica dentro de un terreno de béisbol en las grandes ligas, fallece de un bolazo en la cabeza el campocorto y segunda base de Cleveland Ray Chapman de 29 años quien fue golpeado por el pitcher de los Yankees Carl Mays.

Marv Goodwin un lanzador derecho de San Luis de 34 años es el primer pelotero muerto en un accidente de aviación, el hecho ocurrió en el año 1925 cuando se entrenaba como piloto en un avión de la fuerza aérea.

En el año de 1935 perece John Carden un lanzador de 27 años quien jugaba para Nueva York, fue el primer grande liga que murió electrocutado.

En 1958 en un accidente automovilístico pierde la vida a los 49 años de edad una de las figuras más extraordinarias que han pasado por el big show: Mel Ott, conocido como el Maestro Melvin, este pelotero perteneciente al Salòn de la Fama de los inmortales del béisbol jugò 22 temporadas con los Gigantes de Nueva York, pero de èl hablaremos en un artìculo especial.

Al año siguiente Terry Lyons de 50 años de edad, ex primera base de Filadelfia, muere asfixiado mientras su dentista le suministraba un gas.

Para el año de 1967 se conmueve el mundo del béisbol al fallecer en Miami a los 59 años de edad el legendario primera base Jimmy Foxx, jugador perteneciente al Salón de la Fama y quien vistió las camisetas de Filadelfia, Boston y los Cachorros. Murió asfixiado mientras comía y un pedazo de carne se le atoró en la garganta.

En 1967 asesinan de un balazo al catcher mexicano del Veracruz Eloy Gutiérrez.

Al año siguiente en 1968 en Venezuela al estallar un avión comercial que los llevaba al springtrainning perecen Isasias Látigo Chávez de 22 años de edad ídolo en nuestro país y gran promesa como lanzador de San Francisco y Carlos Santeliz un corpulento muchacho jugador de la primera base, prospecto de los Cardenales de Lara y del béisbol mayor.

Puerto Rico y el Caribe se derrumban en 1972 al conocerse la muerte del mas querido de todos los beisbolistas latinoamericanos: el Gran Roberto Clemente, jardinero derecho de los Piratas de Pittsburg, quien llevaba ayuda material y espiritual a Nicaragua, cuando sé cayo el avión que lo transportaba.

En el año de 1978 es asesinado de un disparo Lyman Bostock a los 27 años de edad, veloz jardinero de Minnessotta.

Thurman Munson catcher de los Yankees pierde la vida cuando se estrella el avión que piloteaba, esto ocurrió en el año de 1979.

En 1982 el pitcher mexicano de los Naranjeros y de los Medias Blancas Francisco Barrios fallece por sobredosis de droga a los 27 años de edad.

Para 1984, el amable y querido Gonzalo Marquez un zurdo peligroso con el bate, muere en accidente automovilístico, había jugado con el Oakland en las mayores.

En 1986 el dominicano Roberto Peña ex infielder de los cachorros de Chicago, muere a los 45 años envenenado accidentalmente con alcohol.

Ese mismo año 1986 el ex-primera base jonronero de los tigres de Detroit Norman Cash fallece ahogado a los 51 años.

En 1989 muere por politraumatismos Billy Martín en un accidente automovilístico, fue manager de los Yankees y jugador de segunda base en su época activa, contaba 61 años.

En 1990 los venezolanos sufrimos por la muerte del extraordinario receptor Baudilio Bo Diaz, quien fue triturado por una antena parabólica.

Ese mismo año 1990 en accidente vial perece Aurelio Monteagudo pitcher cubano a quién los venezolanos y mexicanos lo teníamos como compatriota. Su tocayo Aurelio López un lanzador mexicano quién jugó con Detroit muere dos años después por la misma causa.

En 1993 unos atracadores asesinan a balazos a Gustavo Polydor venezolano infielder de California.

Ese mismo año en Norteamérica fallecen los lanzadores Tim Crew y Steve Olin después de estrellar su bote.

En 1998 muere el dominicano Rufino Linares en accidente automovilístico, jugó en los jardines de los Bravos de Atlanta.

Cattfish Hunter lanzador perteneciente al Salón de la Fama quien padecía de la enfermedad de Gehrig, muere en 1998 en su casa después de sufrir una caída. Hunter ganó 224 juegos con Oakland y los Yankees.

Al comenzar el año 2000 continúa la mala suerte para los Aurelios, le tocó en esta oportunidad al excelente caballero Aurelio Rodríguez, uno de nuestros jugadores favoritos por aquellos años mientras defendía la tercera base del Detroit, tenía 52 años cuando fue arrollado por un auto.

Ese mismo año 2000 pierde la vida el dominicano Andujar Cedeño, por accidente automovilístico, jugó con Houston en el campocorto.

En el 2001 perece por la misma causa Miguel del toro mexicano de Sonora lanzador de San Francisco.

En el 2002 todos los fanáticos del béisbol, quedamos sorprendidos por la trágica muerte del Almirante Nelson Barrera el jonronero más grande que ha dado México. Barrera falleció electrocutado.

Al despedirme les advierto que esta es solo una pequeña muestra de la gran cantidad de muertes trágicas que han ocurrido en los principales protagonistas del más fabuloso de los deportes.

Francisco "Zurdo" Alcaraz

Lo siguiente es una historia que me conto mi padre. Sucedio en 1945 cuando el jugaba para el equipo de Parral en la desaparecida Liga Nacional, la cual fuera una liga muy fuerte que se jugo de 1944 a 1949 en el norte de Mexico. Se enfrentaron en un doble juego dominical los equipos de Parral vs Saltillo. Para el primer juego, ambos equipos abrieron con sus pitchers estrellas. Por Saltillo Vicente "Corazon" Torres y por Parral Francisco "Zurdo" Alcaraz. El juego resulto muy cerrado y ambos pitchers se mantivieron fuertes en la loma por las 9 entradas, ganando Saltillo con "Corazon" Torres por una carrera y perdiendo el "Zurdo" Alcaraz.
Para el segundo juego de la doble cartelera, el "Zurdo" en un acto de pundonor y coraje profesional, le pidio la bola al manager para poder asi "sacarse la espina", de esas cosas que ya no se ven en el beisbol, por diversas razones. Lo curioso fue que al ver calentando al "Zurdo" para el segundo juego, "Corazon" Torres fue con su manager y tambien pidio la bola para tirar el segundo juego. El segundo juego no fue tan cerrado como el primero ya que al "Corazon" Torres se le canso el caballo y no aguanto las 9 entradas y asi el "Zurdo" lanzando su segundo juego completo del dia, se saco la espina y gano el segundo partido de la doble cartelera. De esa manera el "Zurdo" tiro 18 entradas en un solo dia. Al final del juego "Corazon" Torres se dirigio al dogout de Parral donde mi padre lo recibio con un saludo de mano y un abrazo, lo cual el publico presente celebro aplaudiendoles acaloradamente. De esas hazanas ya no pasan en el beisbol. Eran otros tiempos.



Heroe y Villano en el mismo pueblo.
Definitivamente si tu le hubieras preguntado a mi padre cual fue su maxima gloria dentro de su carrera en el beisbol, sin duda alguna el te hubiera contestado que fue el dia que le dio el triunfo a Mexico lanzando contra los Cubanos en 1943 en La Habana, Cuba. A su regreso a Mexico fue recibido como un heroe. En su natal Empalme la recepcion fue "apoteotica". Con escolta y toda la cosa. Sin embargo muchos anios despues, la escolta fue para que no lo lincharan. En esa ocasion, ya de umpire de la Liga Sonora Sinaloa, en un juego celebrado en Empalme contra el archirival Guaymas, el Zurdo marco una jugada que definio el juego a favor del equipo de Guaymas. La gente se enojo tanto que lo querian linchar, y le gritaban "vendido" "traidor" y le decian hasta de lo que se iba a morir. La policia tuvo que venir a sacarlo del estadio escoltado. El que en alguna ocasion fuera escoltado por la policia como heroe, ahora estaba siendo escoltado por la policia del mismo pueblo pero para que no lo lincharan. Como el decia "son gajes del oficio"


Mi padre siempre fue una persona de un caracter muy fuerte y que se dejaba llevar mucho por sus impulsos. Por esa razon tuvo muchos pleitos a golpes y de palabras. Pero tambien demostro que tenia la prudencia y la inteligencia de saber cuando hacerlo. La siguiente es otra historia de mi padre cuando jugaba para el equipo de Empalme durante la III Liga de Sonora. Era el anio de 1946 en la Casa del Pueblo, jugando contra Hermosillo cuando un grupo de fanaticos se pusieron a insultar al "Zurdo" de manera grosera y ofensiva. Dio la casualidad de que en ese juego estaba presente el que entonces era Gobernador de Sonora, el General Abelardo L. Rodriguez. Debido al profesionalismo que mostro mi padre al ignorar a los fanaticos que lo ofendian el General Abelardo L. Rodriguez le escribio a mi padre una carta que te la voy a escribir tal cual.

Sr. Francisco Alcaraz, Novena de Empalme, Son.
Muy estimado y fino amigo: En el juego que se efectuo aqui el sabado 13 del actual, en la tarde, entre Hermosillo y la novena de Empalme, estuve presente, habiendome dado cuenta con positiva pena del poco escrupulo e ignorancia de algunos espectadores, que lejos de hacer honor a la civilizacion, con tolerancia y comprension, dan rienda suelta a sus impulsos con insultos soeces e indignos, ante publicos que merecen mayor atencion y decencia. Ese dia te llenaron de injurias con un absoluto desconocimiento del verdadero espiritu deportista, y tu, como verdadero deportista que eres, y de reconocido buen comportamiento, te portaste como un caballero dando una leccion de prudencia, y de decencia a aquellos ignorantes que te befaban. Quiza haya contribuido mi presencia como autoridad, para detener tu justos deseos de castigar a los majaderos por tu propia mano, cosa que te agradezco y te felicito por tu buen juicio.
Me voy a permitir publicar esta carta para que el publico de Sonora te conozca mejor, y sepa que tu fuiste a Cuba y a Venezuela en representacion de Mexico en aquellos paises en el campo deportivo.
Te saludo muy afectuosamente, deseando que sigan tu ejemplo no solamente los muchachos de tu novena, sino todas las juventudes deportivas del Estado.
Gral de Division
Abelardo L. Rodriguez


Aaron A. Alcaraz

Mi profesión es mi pasión

“El béisbol es todo lo demás son solo detalles de la vida”

Por: Charlye Barrera

Las pasiones llevan a tomar diferentes caminos en la vida diaria. Hay quienes se apasionan con distintas cosas.

Haciendo un real análisis, me preguntaba qué es lo que apasiona a los cronistas deportivos.

Yo se el deporte que practiquen o no, tiene que desarrollar un sentimiento especial por el mismo para poder transmitirlo a su público, unos sienten pasión por el llamado deporte del hombre, el fútbol, otros más defendemos que la estrategia y la magia solo la tiene el verdadero rey de los deportes, el béisbol, pero esto es entrar a camisa de once varas puesto que opiniones habrá muchas al respecto.

Un servidor cual cronista deportivo, me ha tocado narrar desde el fútbol, pasando por el básquetbol y por supuesto nuestra verdadera vocación y pasión, la crónica de béisbol. Ahí nos hemos topado con leyendas del micrófono, que nos aportan información pero sobre todo nos cuentan sus experiencias, anécdotas, charras, etc.

Un sinfín de leyendas que se van manteniendo por el tiempo y que siempre conllevan a enriquecer el mundo del béisbol. Y esto, nos afirma que no nos equivocamos al decir que nuestra pasión siempre será este mágico deporte.

Nuestros inicios, fueron haciendo “pininos” con nuestro amigo Raúl Rodríguez, en un campeonato internacional de béisbol en el majestuoso estadio “Abelardo L. Rodríguez”. En ese momento empezó esa chispa por el ser participe de una u otra forma de nuestro deporte favorito, si no era jugándolo, sentíamos la necesidad de estar ahí. Después de eso, pasamos ya a tomar más en serio nuestro sueño.

Llegamos a ser parte de equipo Ostioneros de Guaymas a nivel terreno de juego, estábamos en el terreno sagrado, describiendo jugadas de un equipo que llevamos en la sangre como guaymenses. Paso siguiente, brinco a ser el cronista oficial del club, teniendo como testigos a toda una comunidad que nos solo vivía el béisbol, sino que para ellos era parte de su religión, por las ondas hertzianas de la Doble X 630 AM.

La llegada a la Liga Mexicana del Pacífico, fue a un equipo leyenda y muy sonado en estos momentos, los Yaquis de Ciudad Obregón, como uno de los primeros cronistas viajeros del club narrando para la estación OX, primero en radio y después, se da la gran oportunidad de narrar 21 juegos por televisión con la cadena Telemax.

Vivimos intensamente cada uno de los encuentros, una magia aparte ya que transmitías con imagen todo lo que el fanático no solo sentía ahora tenia la idea real de lo que decías. Llegaba la fecha de un 9 de diciembre del 2006, el esplendoroso estadio “Tomas Oroz Gaytán” iba a ser el escenario de una gran hazaña, que jamás me paso por la cabeza presenciar, puesto que hay cronistas que tienen muchos años e incluso otros que se retiran sin que les toque, el narrar un juego perfecto, como el que nos toco transmitir ese día.

Joakim Soria nos daba una regalo más y engrandecía nuestro cariño hacia este deporte, nueve entradas de agonía, manos sudorosas y pensamientos de que si lo lograría o no. Estábamos más nerviosos que el mismo lanzador, pero la historia se escribió y aquel nueve de diciembre es una fecha imborrable en nuestro libro anecdotario.

Hoy enfundados en la casaca de los legendarios Potros de Tijuana que hicieron su historia en el invierno y ahora escriben en la Liga Mexicana de Béisbol, nos toca el honor de compartir el micrófono con toda una leyenda no solo del deporte rey en nuestro país sino que tiene sus momentos ya en Grandes Ligas.

Nos referimos a Gustavo López Moreno, a quien cada partido le aprendemos su temple y pasión por nuestro amado deporte llamado béisbol. Hoy quisimos compartir este corto pero sincero escrito con todos ustedes amigos cronistas, porque sea el deporte que sea que les toque llevar a una crónica los invitamos a sentirlo con pasión, pero no de fanático sino de un aficionado, pues hay que recordar que somos el transmisor de sentimientos y emociones para muchos.

Yo como siempre les digo, que, para su servidor “Todo es béisbol lo demás son solo detalles de la vida”, éxito para todos y una vez más bienvenidos a este IX Congreso de Cronistas Deportivos del Estado, y al bello puerto de Guaymas, Sonora.

Por fin… ¡Yaquis Campeones!

De Campeonato
Asención Sánchez Vázquez

Freddy Sandoval pareció un tierno cordero frente al depredador número uno de la tribu yaqui, y se cumplió la sentencia que es ley de vida de que el pez más grande se come al chico. Joakim Soria aderezó a la víctima 27 de los cajemenses con amargo chocolate para él y los porteños presentes, mientras el júbilo y no pocas lágrimas rociaron el rostro de jugadores, técnicos, administrativos y miles de aficionados que estuvieron y no en el “Teodoro Mariscal”.

El triple del “Fello”Amézaga que terminó anotando la carrera “de campeonato” tras sencillo de Jorge Padilla en la sexta entrada, fue todo lo que Yaquis requirió para acotar severa crisis de 27 años sin un título. A partir de allí los sentimientos encontrados. Muchos querían en su fuero interno coronarse esa misma noche, pero seguramente fueron más, miles, los que hubiese preferido fuera el escenario ideal el “Tomás Oroz Gaytán”.

Homar Rojas sabe bien que en este juego de pelota nada está escrito y no dio ninguna concesión al manejar de manera espléndida un cuerpo de pitcheo que trabajó por nota la noche de anoche. Pablo Joel Ortega, el serpentinero derrotado, lució como un guerrero del montículo y cayó con honores. Fue el pitcheo lo mejor de la serie. Basta ver los ínfimos porcentajes de bateo de la inmensa mayoría de toleteros.

Las calles de obregón anoche, hoy, y durante muchos días, lucieron, lucen y lucirán más festivas que el carnaval de Mazatlán. El indómito yaqui comió machaca de venado, así como antes se había deleitado con unas riquísimas entomatadas que se combinaron en su estómago con el jugo de caña que les antecedió en la ingesta rumbo al título cuatro logrado por la franquicia en la MEX-PAC.

Lo perfecto es inhumano pero los sueños sin límite. Cuántos no habrán bosquejado el final más feliz mañana martes o el miércoles en el “TOG”. Pero no hubo retorno del juego que tanto apasiona y las lámparas no recibirán el fluido eléctrico que las encienda y vista ese bello escenario de fiesta, bajo el mando de Baltasar Valdez, responsable de que el parque luzca como “pa’ir de boda”. Felicítense todos que se lo merecen.

Propietarios y directivos; peloteros y entrenadores; utileros y asistentes; el Chacho y la Chacha; cronistas y reporteros; fotógrafos y camarógrafos; taqueros y cocteleras; los balderos y quinieleros; los patrocinadores y publicistas; los que vendieron, y venderán, todavía, souvenirs de los Yaquis; pero sobre todo tu, aficionado fiel cuya motivación, este2008, fue la fórmula perfecta para ser campeones.

¿Héroes? En la victoria todos: Iker Franco, Said Gutiérrez, Carlos Valencia, Manuel Vélez, Alfredo Amézaga, Agustín Murillo, Jaime Brena, Carlos Rivera, Sergio José Santos, Albino y Sergio Contreras, Jorge Padilla, Jason Botts, Kit Pellow, Joakim Soria, Adrián Ramírez, Eder Hiram Llamas, Julio César Jiménez, Andrés Iván Meza, Juan Carlos Terrazas, Rafael Alfonso Cruz, Justin Lehr, Isauro Pineda, Juan Azael Álvarez.

Juan Enrique Quintanilla, Jesús Aurelio Rodríguez, Hugo Castellanos, Rosario Esteban Haro, Miguel Rubio, Homar Rojas, Adolfo Navarro, Alfredo Félix, Jesús Manuel López, Francisco Chávez, Manuel Gerardo Sánchez, Jesús Moreno Rivera, Roberto Vizcarra, William Oliva, Manuel Sauceda, Juan Manuel Escalante, Enrique Amarillas, Christian Alaniz, Guillermo López, Vicente Maldonado, Reyes Félix y Samuel Wong.

¡Cosa más grande caballero!

Babalú.
asencion61@hotmail.com
tibosanchez@gmail.com

CRESCENCIO REYES: Quiso volar, a los 20 años… y voló.

Se fue a la jungla de asfalto, el Distrito Federal, a encontrarse con su destino: la educación física.

Desde la entonces comisaría de Pueblo Yaqui, en pleno corazón del otrora granero de México, municipio de Cajeme, mi dilecto Chencho Reyes amplió sus miras profesionales, alejando de sus expectativas de vida los surcos agrícolas.

El campesinado perdió a un hombre con un potencial de fortaleza ideal para las tareas propias de la región donde vio la luz primera un 19 de abril de 1945, pero la educación física en la región Guaymas y Empalme, ganó al más capacitado de sus instructores en toda su historia.

En Hermosillo obtuvo su licenciatura en Educación Física, carrera que fortaleció con decenas de cursos, talleres y diplomados en nuestro país, pero también en el extranjero.

Miles de niños y jóvenes, muchos de ellos hoy adultos, y gente de bien, fueron sus alumnos en sus 40 años de labor ininterrumpida y, me consta, goza del cariño y saludo de la inmensa mayoría, gracias a su incuestionable vocación de servicio, aderezada por la tolerancia que requiere la docencia, amén de su habilidad pedagógica.

Lo conozco desde hace tres décadas y, lo constaté siempre, fue un hombre entregado a lo que eligió como su pasión y vida: la instrucción y práctica deportiva, particularmente como jugador de fútbol en los campos ubicados a fines de la década de los 60, del siglo pasado, en el área donde hoy se encuentra Cruz Roja y las agencias automotrices Ford y Nissan.

Compartimos tiempos políticos partidistas relacionados con el deporte. Después fue, por muchos años, fuente de información a mi paso por los diarios como reportero, y la constante fue, siempre, su mano extendida y el saludo fraterno.

Vivimos juntos una gran aventura llamada Liga de Béisbol Semiprofesional de los Tres Valles, pero también aquellas jornadas gloriosas de los históricos Cachorros de Guaymas que en su primer año en el fútbol profesional de la Tercera División, lograron el ascenso.

No coincidimos, como es lógico, en algunos debates sobre diversos tópicos de nuestro quehacer y entorno, pero siempre se impuso la madurez de quienes ponderamos el derecho al disenso, lo que fortaleció, siempre, el reconocimiento mutuo.

En el recuento de los hechos, Crecencio Reyes Carrasco se va con la frente muy en alto, seguramente satisfecho del deber cumplido desde el aula más modesta, hasta las impresionantes instalaciones universitarias del Tecnológico de Monterrey y el ITSON.

Pero más satisfecho debe sentirse de la oportunidad que le dio la vida de ser padre y abuelo.

Solo él sabe que hará a partir de hoy con su tiempo libre, pero seguro estoy que cuando amerite su presencia en cualesquier acto a favor de la comunidad deportiva, allí estará.

Hoy, cosecha lo que por años sembró: el reconocimiento sincero de los aquí presentes.

¡Honor a quien honor merece!

Asención Sánchez Vázquez
Guaymas, Sonora, México
1 de noviembre de 2007

Entronizados de Guaymas y Empalme

Guaymas

Rodolfo "Rudy" Sandoval


* Nació el 25 de Enero de 1937
* Lugar de origen: Guaymas, Sonora, México
* Electo en 2001
* Categoría: Jugador
* Posición: Receptor

Uno de los grandes receptores mexicanos de todos los tiempos.

En la Liga Mexicana juega veinticuatro temporadas en esa dura posición. Participa en 1949 juegos para los equipos Tigres, Laredo, Puebla, Reynosa, Sabinas, Monterrey, Chihuahua, Poza Rica y México. Batea para un porcentaje de .259.

Jugó siete temporadas en la Liga Mexicana del Pacífico para Culiacán, Empalme, Navojoa, Guaymas, Mazatlán y Hermosillo, incluye un play off, juega 411 juegos y batea un excelente .265.

Inicia su carrera de manager en 1983 con Saltillo. Dirige a Torreón, Puebla, Campeche, San Luis Potosí y Tabasco. En ocho años dirige 639 juegos, para un porcentaje de .511, gana 323 juegos y pierde 309. Va dos años a series de play off con Puebla y Campeche, jugando para un porcentaje de .667; en 21 juegos gana 14 y pierde 7. En 1986 obtiene el campeonato con Puebla.

Jesús Sommers


* Nació el 11 de Noviembre de 1949
* Lugar de origen: Guaymas, Sonora, México
* Electo en 2002
* Categoría: Jugador
* Posición: Tercera Base

¡El Rey del Imparable!. El sonorense dejó cifras muy importantes durante su participación en la pelota mexicana.

Se inició como antesalista pero también jugó la primera base. En el verano es dueño de los récords de más temporadas jugadas en todos los tiempos, así como más juegos jugados, más veces al bat, más hits conectados, más hits dobles y más temporadas conectando 100 o más imparables.

Sus 27 temporadas fueron repartidas con los equipos de Yucatán, Puebla, Aguascalientes, Tampico, Toluca, México, Tabasco, León, Torreón, Jalisco, Industriales, Aguila y Poza Rica. Globalmente bateó para .291 de porcentaje, jugando en 2,908 partidos con 10, 327 veces al bat, ocupando el cuarto lugar en carreras anotadas con 1,455, tercero en impulsadas con 1,534, doceavo en jonrones con 241 y primero en hits con 3,004 y dobles con 488. En fildeo ostenta el récord de más temporadas jugadas para un tercera base con 18.

Durante nueve temporadas bateó arriba de los .300 de porcentaje y sus mejores temporadas fueron en 1984, 86 y 87 con los Bravos de León. En 1984 bateó para .327 con 27 cuadrangulares y 101 carreras impulsadas. En el 86 tuvo su mejor promedio con .356 milésimas con 18 jonrones y 86 producidas y al año siguiente bateó .351 con 29 vuelacercas y 114 producciones, la mejor cifra de su carrera.

En el invierno jugó 25 temporadas con los equipos de Guaymas, Culiacán, Cd. Obregón, Guasave, Tijuana, Mazatlán, Los Mochis y Mexicali. Es séptimo lugar en hits con 1,073 y cuarto en dobles con 175, actualmente es el gerente general de las Aguilas de Mexicali.

Alfredo "Yaqui" Ríos

* Nació el 24 de Agosto de 1937
* Lugar de origen: Guaymas, Son., México
* Electo en 1990
* Categoría: Jugador
* Posición: Tercera Base

Excelente jugador de cuadro que desde joven destacó con la selección Sonora en los Juegos de la Revolución en 1952; al año siguiente, representando a su estado, su equipo fue Campeón Nacional en Hermosillo, Son. Posteriormente, con la Selección México, asistió al Campeonato Mundial en Caracas, Venezuela, donde impuso un récord de 51 lances sin cometer error.

Ese mismo año, 1953, formó parte del equipo México en los Juegos Centroamericanos que se realizaron en el Distrito Federal. En el invierno de ese año fue firmado por los Cardenales de San Luis, asignándolo al Club Mexicali. Al año siguiente se hizo profesional jugando con los Mineros de Cananea, club al que sirvió durante tres temporadas, ya que los Senadores de Washington lo firmaron y lo enviaron a su sucursal de Corpus Christie.

Allí fue contratado por los Sultanes de Monterrey, con quienes jugó durante 12 temporadas, después pasó a los Diablos Rojos del México, luego a Torreón y finalizó como jugador activo con los Tigres de México.

En el invierno debutó con los Venados de Mazatlán, donde fue elegido como el mejor Novato del Año de 1954. En la Liga Invernal de Sonora alineó con los Ostioneros de Guaymas, pasó después a los Yaquis de Cd. Obregón y Cañeros de Los Mochis, regresando a Guaymas, donde terminó como jugador activo, continuando en el beisbol profesional como manager o coach.

Su nombre aparece en los libros de récords de los dos máximos circuitos mexicanos con números muy contundentes, tanto a la ofensiva como a la defensiva.

Empalme

Ángel Castro

* Nació el 20 de Abril de 1917
* Falleció el 10 de Enero de 1983
* Lugar de origen: Empalme, Son., México
* Electo en 1964
* Categoría: Jugador
* Posición: Primera Base

Es recordado como uno de los grandes bateadores que han desfilado por la Liga Mexicana . Jugó 20 temporadas, primero con los Alijadores de Tampico y después con otros clubes. Fue el segundo pelotero que conectó tres jonrones en un juego (en 1939 con Tampico) y comparte el récord con dos cuadrangulares en un inning (en 1957 con el Águila ).

Por mucho tiempo fue dueño del récord de jonrones para un bateador zurdo en todos los tiempos con 230. Su mejor temporada fue la de 1951, con los Azules del Veracruz, al conquistar la triple corona: bateó .354, disparó 22 cuadrangulares y empujó 79 carreras (en este capítulo empatado con René González).

Fue campeón de jonrones y de carreras producidas durante cuatro temporadas. Entre sus hazañas inolvidables, en 1945, en el puerto jaibo, decidió con jonrón en el décimo episodio por 1-0, en sensacional duelo entre Jesús "Cochihuila" Valenzuela, del Tampico, y Tomás "Planchardón" Quiñones, del Puebla; su cuadrangular fue el único hit que recibió Quiñones.

Cuando se retiró del beisbol en 1957, el famoso sonorense dejó varias cifras notables, además de sus 230 jonrones: 1914 hits, 1219 carreras impulsadas, 6249 veces al bat, 1048 carreras anotadas y 959 bases por bolas, que entonces, establecieron récords. En su carrera, logró .306 de promedio global de bateo.

Francisco "Zurdo" Alcaraz

* Nació el 26 de Octubre de 1920
* Falleció el 1 de Mayo de 1996
* Lugar de origen: Empalme, Sonora, México
* Electo en 2007
* Categoría: Ampayer

Nació el 26 de octubre de 1920, en Empalme, Sonora.
Falleció el 1 de mayo de 1996 en Guaymas, Sonora.
Conquistó lauros inolvidables para México como jugador amateur en la década de los cuarentas.

Ingresó como ampayer a la desaparecida Liga de la Costa por recomendaciones de Antonio Galán, entonces secretario del circuito.

Jack Powell, instructor de ampayers lo recomendó a la Liga Arizona, la cual fue conocida a partir del año siguiente como Arizona-México, desempeñando muy buen papel.

Ahí participó en las temporadas de 1957 y 58, después ingresó a la Liga Mexicana con muy buenos comentarios de la prensa del norte como de la ciudad de México, con una permanencia de nueve temporadas, de 1959 al 68.

En la Liga Mexicana del Pacífico trabajó de 1967 al 71 y vivió una grata experiencia al laborar dos años (1972 y 73) en la Liga Venezolana.

En 1974 retornó a la Mexicana del Pacífico, donde tuvo oportunidad de participar otros tres años y de 1977 al 82 estuvo en la Liga de Sonora.
Su carrera como ampayer en el beisbol mexicano consta de 27 temporadas.

Miguel "Pilo" Gaspar


* Nació el 7 de Septiembre de 1929
* Lugar de origen: Empalme, Son., México
* Electo en 1994
* Categoría: Jugador
* Posición: Receptor

Un verdadero genio a la defensiva; reconocido internacionalmente como uno de los mejores receptores del beisbol mexicano, bateador consistente y seguro. "Pilo" fue de esos toleteros que podían dar el batazo a cualquier lanzador en el momento más oportuno.

En 1949 se inició profesionalmente en la Liga de la Costa con el equipo Guaymas y fue el Novato del Año.

Después, y durante ocho temporadas, jugó en Estados Unidos, tres años con sucursales de los Orioles y una con los Dodgers. Además, con Austin, San Antonio y Laredo, Texas, equipo con el cual bateó cuatro cuadrangulares en un juego.

En la Liga Mexicana se inició en 1951 con Nuevo Laredo, después pasó a Yucatán y Veracruz, continuó con el Aguila 10 temporadas; en 1970 y 71 con Torreón, luego Tampico y terminó su carrera después de cuatro años con Chihuahua; su global de bateo fue de .282.

En la Mexicana del Pacífico alineó con los equipos Guaymas, Navojoa y Naranjeros de Hermosillo; conectó 503 hits y su promedio fue de .262. También estuvo en las Ligas Invernales Beto Avila, Veracruzana, Sonora- Sinaloa y Puerto México.

El Beisbol Organizado premió su excelente desempeño a la defensiva de .998 de porcentaje con un "Guante de Plata". Su alineación en 2 mil 350 juegos en verano y mil 700 en invierno indican que participó en 4 mil 50 partidos de beisbol, más 200 de exhibición durante su carrera, la cual inició el 17 de abril de 1948. Actualmente se desempeña como manager o coach.

Ronaldo "Ronnie" Camacho

* Nació el 26 de Octubre de 1935
* Lugar de origen: Empalme, Son., México
* Electo en 1983
* Categoría: Jugador
* Posición: Primera Base

Desde niño, fue motivado a ser un gran beisbolista, cuando en mano de su tío Laureano Camacho, el legendario catcher del Unión Laguna, recibió un guante que le mandó regalar el maestro Martín Dihigo.

En 1953 se inició como profesional con el equipo Aguilas de Mexicali, jugando la segunda base. También participó con algunos equipos de Doble “A” y Triple “A” del sur de los Estados Unidos y en 1954 comenzó a jugar en nuestro país con el equipo Yaquis de Ciudad Obregón en la Liga de la Costa del Pacífico.

La temporada de 1956-57 la jugó con el equipo Xalapa de la Liga Veracruzana; en 1956 llegó a la Liga Mexicana con los Tecolotes de Nuevo Laredo. Ese año fue el último que jugó como segunda base, ya que en lo sucesivo cubrió generalmente la inicial.

En 1963 rompió la marca de jonrones de Aldo Salvent (36), imponiendo un récord con 39, mismo que le superara Héctor Espino al año siguiente.

La vida deportiva de "Ronnie" está llena de hazañas y de anécdotas, que él mismo relata en el libro de su vida, editado en 1978.

Camacho jugó profesionalmente por 25 años. En la Liga Mexicana lo hizo con los equipos: Tecolotes de Nuevo Laredo, Pericos de Puebla, Aguila de Veracruz, Leones de Yucatán, Broncos de Reynosa, Tigres de México y Rieleros de Aguascalientes.

En la Mexicana del Pacífico alineó con los Yaquis de Ciudad Obregón y Ostioneros de Guaymas. El nombre de "Ronnie" Camacho aparece repetidas ocasiones en los libros de récords y sobresale como uno de los grandes jonroneros de todos los tiempos en el Beisbol Mexicano.

Al retirarse de los diamantes, su honestidad reconocida y el testimonio de hombre cabal, ha aumentado su simpatía al grado de llevarlo a ocupar puestos públicos en su comunidad.

1867: LOS PRIMEROS SONORENSES QUE JUGARON AL BEISBOL

Por César González Gómez

Comencé investigando la versión que conocíamos de la llegada del béisbol a Sonora sin sospechar que los hallazgos y las evidencias iban a dar un vuelco diametral a esta versión que fue publicada en 1946 por el magistral Miguel S. Durazo como parte de su monumental libro El Béisbol en Sonora. En dicha versión presenta el testimonio de don Torcuato Marcor quien relata que, siendo un niño de 10 años, le tocó ver llegar al puerto de Guaymas en Mayo de 1877 al Montana, supuestamente un buque de la marina de guerra de Estados Unidos.
Los marinos descendieron de dicha unidad y pidieron permiso para limpiar un terreno aledaño y practicar el béisbol en un lugar que, entonces, era llamado La Plaza de las Carretas. Rápidamente, la gente comenzó a reunirse para presenciar el juego causando especial admiración e hilaridad la careta de catcher. La gente no se explicaba como una persona pudiera ver con semejante obstáculo frente a sus ojos.
Según la misma versión de don Torcuato Marcor los muchachos sonorenses siguieron practicando el juego cuando los marinos se fueron y, así, se popularizó el juego y se diseminó por el estado. El Montana, según Marcor, se habría hundido en la bahía de Guaymas en 1878 luego de un incendio.
Un día, platicando de otros aspectos históricos con la directora del Salón de la Fama, la C.P. Magdalena Rosales, surgió la necesidad de dotar a los orígenes del béisbol en México de un estudio serio y un sustento documental para su mejor entendimiento.
Me ofrecí para iniciar un trabajo que lleva casi dos años visitando archivos, revisando periódicos del siglo 19 y cotejando información dentro y fuera del país como parte de una investigación histórica a nivel nacional que busca confirmar y depurar, o bien, desmentir las versiones que actualmente conocemos sobre la llegada y proliferación del béisbol en nuestro país. Asimismo, se realiza una extensa búsqueda documental para situar otros brotes tempranos de béisbol en nuestro territorio e, incluso, fuera de él. Este trabajo corre a cargo de un servidor y cuenta con el aval del Salón de la Fama del Béisbol Mexicano
Comencé investigando la versión de Sonora, por su grado de importancia y su riqueza en elementos rastreables. Los resultados fueron de extrema sorpresa.
Se encontró que el Montana, el barco más famoso en la historia del béisbol, no era militar, sino que se trataba de un vapor que transportaba carga, correo y pasajeros desde San Francisco a varios puertos mexicanos, entre ellos Guaymas, y llegaba hasta la desembocadura del Río Colorado en lo más alto del Mar de Cortez para luego regresar siguiendo la misma ruta.
Pero lo más impactante fue ir encontrando documentación que situaba el hundimiento del Montana unos meses antes del supuesto juego histórico. En realidad, el Montana se hundió el 14 de Diciembre de 1876 según la última bitácora del buque, el control de tráfico marítimo de Guaymas de ese mes y una nota publicada en el New York Times unos días después del siniestro informando de la noticia.
Al momento en que el supuesto juego histórico ocurría, el Montana tenía casi 5 meses hundido. Otro elemento clave en la historia es la careta de catcher que tanta sorpresa habría causado según el relato original pero que, sin embargo, su presencia en Guaymas en esos días habría sido casi imposible.
La careta se usó públicamente, por primera vez, en Abril de 1877 por el receptor del equipo de la universidad de Harvard, cerca de Boston y las primeras evidencias de su comercialización se tienen fechadas en Agosto de ese mismo año, por lo que su presencia en Guaymas apenas unos días después luce muy poco probable.
La evidencia arroja que los elementos citados en la versión del sr. Marcor no pudieron haber coincidido en Guaymas en Mayo de 1877. El barco ya se había hundido, y la careta era una recién nacida.
En realidad, el matrimonio de Sonora con el béisbol pudo haber iniciado en 1867, diez años antes de la supuesta llegada del Montana.
La intervención francesa motivó que muchas familias adineradas del occidente del país enviaran a sus hijos a estudiar a California en los Estados Unidos siendo el Santa Clara College, cerca de San Francisco, uno de los colegios predilectos.
El primer mexicano que juega al beisbol según las evidencias hasta hoy encontradas fue José Francisco Godoy, un jovencito de 15 años que en abril de 1866 defiende el jardín central del Eureka Base Ball Club de Santa Clara en California, según lo reportó el diario Alta Californian de San Francisco.
Mientras el joven José Francisco jugaba al beisbol en la primavera de 1866, su padre José Antonio, consul mexicano en San Francisco, gestionaba el envío de armas y dinero para apoyar al ejército republicano de Benito Juarez que buscaba quitar del poder al emperador Maximiliano de Habsburgo, impuesto por la intervención francesa. Juárez, Godoy y los republicanos contaban con el apoyo de los Estados Unidos.
Muchos de esos jóvenes simpatizantes de la causa liberal juarista adoptaron el beisbol como una bandera de repudio a las intervenciones europeas y abrazaban los ideales americanos de república, progreso y anti monarquía. Es entonces que comienzan a practicar el juego.
Unos meses después, durante el verano de 1866 se vivía ya una fiebre por el béisbol en San Francisco que terminó por absorber a los estudiantes mexicanos. En ese año había ya 35 mexicanos en el Santa Clara College, de los cuales 23 eran sonorenses. Entre ellos estudiaba también Saturnino Ayón, un mazatleco.
En Agosto se organiza la Convención de Base Ball del Pacífico que buscaba organizar y estandarizar a los diversos equipos que ya existían en la zona dentro de un mismo conjunto de reglas y estatutos. De Santa Clara, se registraron el Eureka Base Ball Club de José Francisco Godoy y el Original Base Ball Club que registró, como su representante, a Saturnino Ayón de Mazatlán, Sinaloa.
La primera evidencia que relaciona a un sonorense con el béisbol se da el 9 de Abril de 1867 cuando aparece publicado en el diario Alta Californian el reporte de un juego que enfrenta al Original con el Excelsiors. En dicho reporte Adrían Cubillas, procedente de Hermosillo, Sonora, defiende la segunda base. Ayón actúa como pitcher.
Otro nativo de Sonora, Fernando Güereñas, también aparece entre los primeros peloteros mexicanos que conoce la historia. Nativo de Álamos, pero avecindado en Guaymas desde muy pequeño, Güereñas defiende el jardín derecho del Original en el reporte del juego que hace el diario San Francisco Call el 24 de Noviembre de 1867. Ni Ayón ni Cubillas aparecen en este reporte, pues ya se habían graduado y regresado a México.
De los peloteros del Original sobreviven un par de imágenes de extraordinario valor histórico tomadas en 1867 que se constituyen, junto a una imagen de Maximiliano en 1865 jugando cricket, como las fotografías más antiguas relacionadas al deporte de México. En ellas, los peloteros hacen evidente un alto grado de entusiasmo y organización. Debida y meticulosamente uniformados, cuidan hasta el último detalle.
Su distinción es una estrella de cinco puntas que se puede observar en sus gorras y que se repite en la hebilla del cinturón. Esta estrella probablemente representa un símbolo de afinidad con la masonería. Documentación fechada años después, en 1889, prueba que Saturnino Ayón, vicepresidente del Original y uno de sus líderes más visibles, fue miembro de la agrupación masónica de los Caballeros Templarios en México. Cuando conmemoraron los 15 años del fallecimiento de otro distinguido masón, Benito Juárez, Ayón ofrece un apasionado discurso y entrega como ofrenda, ante la tumba de Juárez, una estrella plateada de cinco puntas.
Es muy probable que, a su regreso a México, hayan practicado el juego poniéndolo de moda. Todos estos pioneros del beisbol mexicano eran de clases altas, lo cual cumple con una de las premisas del Modelo de Difusión, que plantea el Dr. Joseph Arbena, experto en la historia del deporte en América Latina. Arbena ha comprobado que los deportes llegan a América Latina traídos por las clases altas como una novedad social, la ponen de moda, haciendo socialmente apetecible su práctica, para luego ser imitadas por el resto de la población consolidando el juego. Este proceso se presentó por estos mismos años en Cuba y luego se repetiría en Nicaragua, Venezuela y Puerto Rico.
El Santa Clara College siguió siendo un gran inspirador de béisbol para el estado de Sonora durante el siglo 19. Los hermanos Ruiz, a quienes se le atribuye la introducción del béisbol a Hermosillo alrededor de 1885, eran estudiantes de esa misma institución. Jorge Boido y Carlos Cáñez que, como peloteros del club Guaymas derrotaron a Hermosillo en 1892, también eran estudiantes del Santa Clara College. Es el mismo caso con Espiridión Robles que habría introducido el béisbol al poblado sonorense de Baviácora en 1895.

Las referencias a las fuentes que sustentan esta investigación pueden ser revisadas en el portal de internet OrigenesDelBeisbol.com

César González Gómez
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